RECORDANDO...
Traté de hacer perpetua cada noche, en el abrazo extenderme hasta el ser y el tiempo, disminuir la distancia en una caricia.
¿Quién no ha sentido terror ante un cielo sin luna?
Desde tu mesa de noche hasta la persiana se extiende ante mi el microcosmos donde nuestras pasiones se engastan.
¿A caso no rutilan, en las noches gélidas, las estrellas con más ahínco?
Solamente los seres afelpados que pueblan tu lecho, serán testigos silentes de las inexpicables formas en que el Dios Amor se hizo presente.
¿Se habrán roto todos los astros?
Puesto que todo se desconforma apenas cruzando el pórtico de tu templo, que tiene por custodio un corazón fragmentado. No existe la duración ni la dimensión: las horas no tienen minutos, y los espacios no poseen medidas.
Sin embargo el Sol nos descobija, hemos de partir.
¿Quién no ha sentido terror ante un cielo sin luna?
Desde tu mesa de noche hasta la persiana se extiende ante mi el microcosmos donde nuestras pasiones se engastan.
¿A caso no rutilan, en las noches gélidas, las estrellas con más ahínco?
Solamente los seres afelpados que pueblan tu lecho, serán testigos silentes de las inexpicables formas en que el Dios Amor se hizo presente.
¿Se habrán roto todos los astros?
Puesto que todo se desconforma apenas cruzando el pórtico de tu templo, que tiene por custodio un corazón fragmentado. No existe la duración ni la dimensión: las horas no tienen minutos, y los espacios no poseen medidas.
Sin embargo el Sol nos descobija, hemos de partir.
2 Comments:
Ahh, amiguisimo, lo que sucede es que tiene un poco de discurso egografico, yo tuve una linda relación con una chava muy muy especial, y en mis locuras y cursilidades, coloqué varios post-it con explicaciones de mi amor, en su puerta y la disposicion era la de un corazón, compues pues por fragmentos...
recuerdo que el más impactante de esos post-it decia:
Te quiero, porque dos más dos son cuatro.
ojalá muchos comprendieran el alcance de esta frase...
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